miércoles, 19 de septiembre de 2007

MEMORIAS DEL ÚLTIMO AÑO

A diferencia mía, durante la preparatoria conocí a alguien con toda la creatividad y talento para escribir una serie de cuentos raros y divertidos en su clase de Creación Literaria (impartida por el profe Juan Manuel Becerril a.k.a. Spider). El siguiente texto, del cual tengo los derechos exclusivos, lo presentó en el último año en un evento donde los participantes de dicho taller leyeron sus trabajos; por cierto, también fungió como maestro de ceremonias.

Feliz cumpleaños, Jorge. Ojalá que estés escribiendo de nuevo, esto es sólo para que recuerdes…

Adiós…
Por Jorge Antonio Contreras Domínguez

Fue mi más grande amor, mi mayor orgullo. Un día ya no estaba…me dejó, sin darme ninguna explicación, ni haberse detenido para decirme: ¿qué estuvo mal?

Al levantarme por las mañanas, veía salir el Sol con un entusiasmo sólo comparable con la explosión del big- bang, la cual estremecía todo en mi interior; era maravilloso contar con tal pasión, sentirla en la mañana, en la tarde y toda la noche.

¿Qué haré ahora? Ciertamente, lo ignoro. Me asusta en demasía la simple idea de tener que enfrentarme al espejo y ver del otro lado un ente extraño, tal vez opaco, vacío, como si el Sol dejara de arder o su resplandor se hubiera extinguido.

A cada minuto me pregunto, ¿…y, si estuviera aquí?:

Supongo que sería más fácil caminar por la calle, hablarle a la gente, dejar fluir el cauce de mis ideas, en vez de lastimar la visión de más de un peatón.
1.1 Aunque, por otro lado, creo que no soportan la luz que irradia de mi personalidad, comenzando por el Polo Norte de mi ser, génesis de mis pensamientos y coordinador de mis movimientos.

Rayando por el camino de la especulación, imagino como sería mi vida cotidiana. Dejaría de representar un punto de referencia para las masas…

2.1 …y en una de esas, se desvanecería mi parecido con aquel infame, que con gesto ridículo y la voz plagosa, aparece todos los domingos vociferando cantos bélicos que emergen de la pasión de “todos los aficionados que viven la intensidad del fútbol”.

La delgada línea que divide la realidad del mundo de lo imposible, me limita para seguir entregándole todas mis caricias, emociones, sentimientos, a aquel amor que estuvo aquí…allá…en medio…en mi imagen.

Pienso en todas partes, y hoy, en ninguna.

3.1 Lo mejor para salvar mi alma quebrantada es creer que algún día, no muy lejano, por la cantidad de males que me aquejan y carcomen mi existencia días con día, nos encontraremos de nuevo y nos fundiremos en uno solo, indivisible y eterno.

Por lo pronto, nada de esto ha sucedido; yo, sigo en la pena y el dolor que causa la incertidumbre, grabando mi propio epitafio el cual deberías decir: “Aquí yace quien amó con todas sus fuerzas, lo que todo hombre debe amar”.

Perfecta descripción para lo que una vez atesoré e inexplicable y súbitamente perdí.

Al final sólo te puedo decir adiós…querido cabello…

2 comentarios:

Elizabeth García dijo...
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
Elizabeth García dijo...

Mmmmm
qué decir de esto, a parte de que ya se te acabó la inspiración jaja, bueno está bien no te regañaré, qué divertido!!!