domingo, 16 de diciembre de 2007

¡POR FIN! ¡VACACIONES! LLEGÓ LA IMAGEN NAVIDEÑA DEL BLOG

Bueno, eso de vacaciones...dejénme pensarlo...hay muchos proyectos para trabajar...

Pero el ocio ha invadido durante la tarde a esta blogger y sí, ya me dí cuenta que me vi un poco grinch en el post pasado, - pero las crisis de fin de semestre son la muerte-.

Ahora que he tenido un buen rato de no-hacer-nada pues llegué a un lindo blog de donde me robé una imagen de esa creación simpática de Charles Shulz llamada Snoopy.

Ya escribiré con calma un post decente...mientras tanto, espero todo el mundo esté ya disfrutando de las posadas...

lunes, 3 de diciembre de 2007

SOSPECHO QUE ALGO SUCEDE...

FIN DE SEMESTRE!! Mañana tengo la entrega del proyecto final de un documental, el miércoles la última entrega de tele, examen de Legislación de Medios en la tarde, examen de Sociología del Cine el jueves, otro examencillo el domingo... Otra entrega el 11...y los trabajos finales de radio para el 14...

Y...ahhh...no sé que pasa con el resto del mundo...hay gente tan aburrida y ociosa que se pusieron a adornar árboles adentro de sus casas...

Gente sin que hacer....yo me voy a editar...

domingo, 25 de noviembre de 2007

EUFORIA!! THE POLICE!!! COPELAND!!!


GALERÍA DE STEWART COPELAND

Stewart en acción. Este es un cachito de
King of Pain, con su set de percusiones.


Esta foto me encantó...nótese la sombra de Sting en las bocinas....

En las pantallas, Sting al centro y a los lados fotos de Stewart hace muuuchos años...

Sumner, Copeland y en la pantalla Summers

El momento en que Stewart Copeland desaparece, por última vez, del escenario.

GALERÍA DEL CONCIERTO


En realidad no grabé mucho, pero este era obligado...es un cachito de Every breath you take...

Sting, tapándome la visión de Stewart, pero al menos estaban las pantallas...

Los tres en acción...

Durante Invisible Sun...

Andy Summers

24.11.07 THE POLICE EN EL FORO SOL

25 de noviembre, 2007. 00:54 hrs
Ahhhh!!! Vi a The Police!! Vi a Stewart Copeland!! Vi a Andy Summers!! Vi a Sting con ellos!! Ahhhhh!!! Acabo de llegar a mi casa….

No tuvieron teloneros….entraron solos al escenario. Nada de coristas como en su gira Synchronicity, nada de músicos de respaldo, sólo el bajo del vocalista, el virtuoso guitarrista y el mejor de los bateristas. Eran alrededor de las 9: 30 de la noche, y aparecieron sonrientes, saludo en español de por medio, por parte de Sting. Y enseguida, a lo que llegaron: Message in a bottle, la canción del naúfrago que espera respuesta a su nota, en una isla que resulta no estar tan desierta (a hundred million castaways looking for a home…).

Siguió Synchronicity II (many miles away something crowls to the surface), despúes…rayos… no recuerdo el orden exacto, pero una de las primeras fue Don´t stand so close to me, o Voices inside my head, también estuvo en el setlist Driven to tears y Walking in the Moon.

Tengo una queja de mí para mí….yo fui a ver sobre todo al magnífico, adorable, impresionante (ok, si, ya me viajé) Stewart Copeland, y justo trate de colocarme en un lugar donde tener una buena visión de su batería…mmm…pues no. Resulta que cuando salieron al escenario me di cuenta del gran error: ¡Sting estaba justo entre mis ojos y mi objetivo! Nada raro que eso suceda en la vida del trío, pero...¿por qué a mí?

La situación se salvo cuando la guitarra anunciaba Wrapped around your finger (I have only come here seeking knowledge, things they wouldn´ teach me off in college), y detrás de la batería, surgió un escenario en lo alto. Se trataba de una montón de instrumentos de percusión, marimba y otros muy orientales incluídos, con los que se lució haciendo las entradas de esta canción, y también de King of pain (I guess i´m always doping that you´ll end this reign, but it´s my destiny to be the king of pain…fue por mucho tiempo mi favorita) y en Walking in your footsteps – ¡ambientada con imágenes de esqueletos de patas y sonidos de dinosaurio!-.

Tengo otra queja, esta vez para la policía. Se saltaron dos canciones. De acuerdo al set list que habían manejado en su gira, estaban incluídas Bed´s too big without you (o sí la cantaron?...mmm…help!), y mi favorita actual: Murder by numbers (1,2,3…).

Otra queja….¿para que diablos vas y pasas más de dos horas parado en primera fila esperando a que empiece el concierto, si eres un puberto que por azares del destino llegó allí y no conoces más canciones que De Do Do Do, De Da Da Da y Every breath you take? Eso me pasó con una bola de cuatro individuos, que para mi fortuna no eran altos...

Las canciones más coreadas fueron las ya mencionadas (porque Every breath you take, es, a pesar de todo, LA canción, especialmente si es bien entendida), además de So lonely, De Do Do Do…, un poco Can´t Stand losing you, sin olvidar Every little thing she does is magic, y esa joya que es Roxanne (I loved you since I knew you…I won´t share you with another boy).

La parte emotiva fue en Invsible sun (I don´t ever want to play the part of statistic on a government chart), cuando aprecieron en la pantalla fotos de niños y mujeres - africanos por supuesto, todo rockstar tiene que preocuparse por el continente negro-, gente que ayuda Water Aid, asociación a quien donarán parte de las ganancias de la gira.

No, no son los mismos que yo veía hasta el cansancio en videos cuando iba en la secundaria, y lo hicieron aún más evidente en sus versiones “adulto contemporáneo” –muy ad hoc al cantante Sumners- de Truth hits everybody (take a look at my new toy, It´ll blow your head in two, oh boy) y de Next to you (What can I do? All I want is to be next to you). No son los de las fotos que he coleccionado por años: en vez del amarillo canario como en sus inicios, su cabelllo ahora es rubio platinado, por aquello de que se noten menos las canas; Andy a media presentación ya lucia medio cansadón, rojo de la cara y todo despeinado, además, nada de tumbling como el que usaba en los conciertos ochenteros. Stewart…mmm…¡era muy guapo!, a él sí se le notan los años del mundo en el rostro, y ayer tenía unas ojeras enormes.Y Sting, es Sting.

Sin embargo, creo que en la mejor parte de cada canción, sobre todo en las primeras, y por un minuto, no eran otra cosa más que el auténtico THE POLICE, y a pesar del cansancio, sonreían mucho. Y no pongo en duda que Andy y Stewart dejaron parte del alma en el escenario. (Ok, Ok, ya me viajé de nuevo…¡pero soy fan, estoy eufórica!).

Lo mejor de todo: ¡la cámara de mi hermana, que metí de contrabando!, como pueden ver unas salieron mejor que otras pero entre la emoción y los gritos difícilmente me pude preocupar mucho por la toma (y aún así lo estaba).

Ahhhh… regreso a la realidad. Fin de semestre. Y sobre todo, estoy bancarrota, no pregunten cuanto gaste ayer entre la pulserita, dos pins, una sudadera, bufanda (todo apócrifo, por supuesto) y tres posters de la memorabilia oficial. Mejor, tomen en cuenta que acepto donaciones en efectivo y en especie.

P.D. El de Soda Stereo fue probablemente un mejor concierto…pero lo pase de noche en el blog porque 1. No tuve tiempo de hacer mi reseñita , 2. Con The Police me gana la emoción.

miércoles, 7 de noviembre de 2007

THE RETURN OF THE COPS

Odio que las viejas bandas hagan giras donde tocan sus antiguas glorias, mientras dejan ver a la audiencia sus cabezas calvas, o canosas en su defecto, panzas, arrugas y sus lastimosas voces, huellas innegables del paso del tiempo…pero igual voy a los conciertos. Si bien ya no me tocaron sus años mozos, al menos quiero verlos antes de que sea imposible, y poder decir algún día que estuve allí. Así pues, en febrero del 2006 escuché a los Stones cantando en el Foro Sol, y no estuvieron nada mal, y si Zeppelin viniera… pues ni modo, a gastar.

Hasta hace muy poco, creía firmemente que toda época pasada había sido mejor, por eso empecé a escuchar música de tiempos que no fueron míos, y descubrí grupos, estilos y propuestas muy dispares, pero hipnóticas en muchas casos.

La primera de estas ventanas al pasado en mi vida fue el trío británico que en 1983 –año de su ruptura- eran como los Beatles de su tiempo, y quienes en 1986 – año en que yo nací- tuvieron un breve rencuentro para dar un concierto a beneficio de Amnistía Internacional: THE POLICE. Seguro que primero los escuché alguna vez en Universal Stereo con Every Breath you take, su archiconocida canción.

Tenía como 12 años cuando vi un concierto en MTV donde Gordon Matthew Sumner, alias Sting, apareció cantando con los Backstreet Boys (…lo admito, en realidad vi el concierto por ellos! Me gustaban! Fue un problema generacional, no??) precisamente esa y otras canciones. Al poco tiempo, en el mismo canal de videos vi un episodio de Behind the Music que dedicaban a los uniformados y eso fue todo, no necesitaba más para saber que había algo más interesante que las canciones ñoñas que un grupo de tipos bailando cantaban al unísono. Me gustó la energía con la cual Stewart Copeland tocaba la batería, la voz chillona y rabiosa de Sting, y Andy Summers me dio ternura :). Me impresionó el desparpajo con el que actuaban, nada que ver con el acartonamiento de las baladas del vocalista cuando se separó de la banda (bueno, Fortress around your heart, es linda). Inmediatamente me compré un disco y “estudié” desde Roxanne hasta Tea in the Sahara, de manera obsesiva.

Desde entonces he seguido –gracias a Internet- lo que hacen cada uno de los tres ex integrantes de la banda: Andy, su jazz, su guitarra y sus colaboraciones con músicos que van desde Robert Fripp hasta Gustavo Cerati; Stewart, (mi favorito! ya merecerá un post aparte) los soundtracks creados –Rumble Fish el más sobresaliente, incluso más que la misma película de Francis Ford Coppola- y sus proyectos de bandas alternas, Oysterhead la más famosa; y Sting, ¿qué se puede decir de Sting, quien hasta de actor la ha hecho?

Ya me había hecho a la idea de que a pesar de las posibilidades – todos están vivos y en activo dentro del mundo de la música- no se iban a reunir nunca, sobretodo por la negativa de Sumner (quien por cierto seguía haciéndose rico cantando los grandes temas del grupo en sus conciertos, como lo comprobé en el Palacio de los Deportes en septiembre de 2004; comentario extra: que buena presentación dio Annie Lennox esa noche… ).

Esperé con ansia su ingreso al Salón de la Fama del Rock para verlos juntos aunque sea en fotos, prestaba atención a cada rumor que corría sobre un reencuentro, me emocioné cuando los vi en portada de la Rolling Stone hace como dos años, y en un especial de la Mosca; maldije mi suerte por no ser una cinéfila adinerada para acudir a Sundance cuando Stewart presentó su documental Everyones stares…The Police inside out.

Sin embargo, los rumores fueron en aumento durante la segunda mitad del 2006 y la noticia de que regresaban se confirmó a principios de este año. ¿Cómo perdérmelos después de tanta espera? Cuando los ví en la entrega de los Grammy me horroricé un poco…siempre pensé que en cuanto estuvieran juntos, el tiempo daría marcha atrás y ellos serían igualitos que en los videos de los 80´s. No, la voz no es la misma, la energía que transmitían parece como posada ahora, ya no hay rabia en los ojos de Sting, sino la mirada de alguien seguro en su posición y sin intenciones de atreverse a más…pero fue casi obligación moral para mí ir corriendo en la preventa de conocida tarjeta de crédito para comprar mi boleto. Digo, después de todo a partir de ellos, hacia atrás y hacia adelante en el tiempo, empecé a explorar el rock; no puedo olvidar tampoco que gracias a una banal plática sobre Sting conocí a uno de mis mejores amigos; además me salvaron de escuchar sólo pop por el resto de mi existencia, y eso ya es decir bastante.

El tiempo pasa volando, y ya casi es 24 de noviembre; mientras llega el día los invito a ver el video de So Lonely – probablemente uno de los coros más pegajosos en la historia- el primer clip que vi de The Police.




PD. Alguna vez encontré en Youtube un video de su presentación en México en los 80´s y ahora ya no está! o al menos ya no doy con él...si alguien sabe algo...lo imploro! mándeme el link!

domingo, 4 de noviembre de 2007

EL VUELO DE NUESTRAS VOCES

Hoy 4 de noviembre, se cumplen dos meses exactos de mi entrada oficial a ese proyecto de radio tan sincero, con tanto espíritu y sí, también ambicioso que es TroVAlada. El martes 4 de septiembre de 2007, a eso de las tres de la tarde llegué al Aula Multimedia para ver como Aline y Dalia daban los últimos retoques a la cápsula del día, checaban la escaleta y demás preparación.

Yo recuerdo haberme sentido nerviosa, no sé porqué, supongo como respuesta natural del ser humano cuando se enfrenta a algo nuevo, a un reto venidero. Mmm…corrección, sí sé porqué: resulta que la que aquí firma no sabía nada de trova, y cuando digo nada es de verdad NADA, si acaso uno que otro nombre me sonaba familiar o recordaba algunos datos que Aline había llegado a contarme… y ya. No concebía incorporarme a algo que me resultaba tan ajeno (“ayyy…es que yo sé de rock”, pensaba), y me preocupaba bastante.

Todo estaba listo. Llegó la hora de partir con rumbo a la Cineteca Nacional, donde nos encontraríamos con el invitado de esa tarde. Íbamos todos caminando hacia el metro CU, cuando Rodrigo me miró fríamente y con una voz bastante seca, me preguntó: “¿Cómo me dijiste que te llamabas?”. “Ah...Patricia”, le contesté. “Ahh sí…Paty” respondió en el mismo tono glacial. Dirigí mi mirada de susto hacia Claudia o Aline, pero ambas parecían muy tranquilas así que traté de no darle importancia alguna al asunto del productor gruñón…

La plática en el trayecto me hizo entrar un poco más en confianza con Dalia, pues aunque llegamos a coincidir en alguna materia en semestres anteriores, nunca había sido cercano nuestro trato. Con Rodrigo aún guardaba mi distancia (jaja).

En la Cineteca, conocí -por fin- al tan mencionado por mis nuevos compañeros David Aguilar, nuestro invitado. Gracias a él, descubrí dos cosas o más bien las confirmé: 1. que había todo un movimiento de gente joven y propositiva trabajando en el género (que yo siempre había relacionado con gente de la edad de mi papá), y 2. que la música era toda una delicia novedosa en mis oídos. Ya en el IMER, yo estaba fascinada con este nuevo mundo que comenzaba a abrirse ante mis ojos: las cabinas, los controles, los micrófonos, la salita de espera, el operador, las prisas… y los teléfonos, que hasta ahora Clau y yo seguimos contestando (¡Llamen!).


El equipo de TroVAlada en el cierre del 1er concierto en Las Islas

Aquí, sesenta días después, muchas cosas han pasado; ni parece que sea tan poco tiempo: he grabado algunas de las cápsulas del programa con todo y mi espantosa voz; edité la de Leonel Soto (bueno, Aline la corrigió); soy fan declarada de Juan Pablo Villa y Juan José Lavaniegos, mmm y también del Cuarteto Incompleto, y he conocido una infinidad de música, personas y lugares interesantes.

Sólo me queda agradecerles a mis compañeros, quienes han hecho posible todo esto (en estricto orden alfabético):

ALINE: Muchas gracias por acercarme a tu mundo de música y poetas. Por tu visión siempre práctica de las cosas, por tu paciencia y consejos con mi horrible dicción cuando me grabas – “maestro rural” incluído-; por la magia que creas con el Cool Edit y por tratar de enseñarme a editar – oye, era mi primera cápsula!-. Y sobre todo por este semestre y medio de amistad.

CLAUDIA: Porque entramos al último (tú, dos semanas antes) en esto, y nos hemos apoyado. Por tu buen humor de siempre y la sensibilidad que te caracteriza, por compartir la mesita de los teléfonos, y embobarnos con los cantautores guapos que están tras el cristal – no diré nombres-. Ah … y por olvidarnos juntas de las constancias…(oops!).

DALIA: Gracias por ser una chica tan emprendedora, siempre llena de ideas y proyectos. Por el tiempo compartido en el cual me has permitido conocerte, y por la confianza. Por ser olvidadiza (jaja, no soy la única!), por los trayectos divertidos en el Dalia-móvil. No olvidaré la divertida tarde-noche en Milpa Alta con Picke jaja

RODRIGO: Resultó que no eres enojón. Gracias por andar siempre tras la nota y por tu amplio conocimiento musical. Por ser crítico, y un productor obsesivo que distrae a las locutoras con sus manotazos en la cabina. Por hacernos reir y por siempre querer sonsacarnos para comer tacos Chupacabras jaja

Ojalá siga trabajando con ustedes por muuuucho tiempo (o ya piensan prescindir de mis servicios?), para hacer de TroVAlada algo cada vez más grande. Por mientras, nos quedan cuatro conciertos!

jueves, 18 de octubre de 2007

LUZ, NOCHE, CIUDAD


Esta foto surgió de levantar la cámara hacia la Torre Latinoamericana, medio encuadrarla y disparar. El resultado es por demás deficiente: un velo blanco producto de la luz directa, una subexposición bastante notoria, imagen desenfocada...eso sin tomar en cuenta que el blanco y negro lo logré moviendo los ajustes de la cámara digital. Pero, me gustó, así que aquí está...


sábado, 13 de octubre de 2007

PLATERO Y ...LUIS

Mi ojo superficial sobre tres o cuatro de sus creaciones, y el conocimiento básico de algunos datos que todo buen cinéfilo debe saber, nunca me habían permitido dimensionar el verdadero tamaño de la vida y obra de Don Luis Buñuel Portolés (1900- 1983), hasta que por azar – ese elemento constante en la vida humana, parte esencial de la obra del cineasta – tuve que enfrascarme en la lectura de varios libros sobre él, para preparar una exposición.

¿Qué pasó unas horas después de comenzar? Mis ojos eran incapaces de despegarse de las líneas, que con ayuda de Jean Claude Carriere, el mismo Buñuel nos legó en su autobiografía “Mi último suspiro” de 1982, justo un año antes de su fallecimiento. La verdad este tema no da para un post… da para hacer investigaciones semióticas, hermenéuticas, sociológicas, de discurso… y aplicando todas y cada una de las teorías aprendidas en los seis semestres y medio que llevo de Universidad. (Sí, lo acepto, me conquistó, y la objetividad en el subsuelo).

El universo buñueliano, violento y surrealista – en la más pura congruencia con el manifiesto de Breton-, nos regala apreciaciones del mundo, de la realidad represora, burguesa y clerical que le tocó experimentar en carne propia al director de Calanda, España, pero nacionalizado mexicano en 1949. Pretencioso sería querer resumir una vida y 32 filmes -con todo y sus fetiches, obsesiones y contradicciones- en este reducido espacio. Sin embargo, me permito retomar una de sus imágenes recurrentes de la etapa netamente surrealista para contar una anécdota que ilustra a la perfección a este artista:

Siendo un niño, durante unas vacaciones pasadas en su medieval y querida Calanda – él vivía en Zaragoza – tuvo su primer acercamiento con la muerte: “Un día mientras paseaba con mi padre por un olivar, la brisa trajo hasta mí un olor dulzón y repugnante. A unos cien metros, un burro muerto, horriblemente hinchado y picoteado, servía de banquete a una docena de buitres y varios perros. El espectáculo me atraía y me repelía a la vez…Yo me quedé fascinado, adivinando no sé qué significado metafísico más allá de la podredumbre…”.

Durante su estancia en la Residencia de Estudiantes de Madrid, entre los años del 1917 al 1925, conoció y congenió con gente como Eugenio d´Ors, Bejamín Péret, Federico García Lorca, Pepín Bello y Salvador Dalí. Con estos dos últimos, curiosamente, compartía esa obsesión infantil por los burros podridos, imagen a la que dotaron de un aura de misticismo casi religiosa. Por aquellos años, otro ilustre español, Juan Ramón Jiménez publicó una obra cursilona y sentimental que a más de uno ha sacado una lágrima (bueno a mí sí, lo leí cuando tenía como 9 años): "Platero y yo". Dalí le contaba a Federico: “…soy el anti- Juan Ramón…el (es el) jefe de la putrefacción poética…”.

En 1929, en plena euforia creativa de Un chien andalou (Un perro andaluz, 1929), Luis Buñuel y Salvador Dalí decidieron enviarle una carta a Jiménez, la cual decía más o menos así:

Nuestro distinguido amigo: nos creemos en el deber de decirle – sí, desinteresadamente- que su obra nos repugna por inmoral, por histérica, por arbitraria.
Especialmente ¡¡MERDE!! Para su
Platero y yo, para su fácil y malintencionado Platero y yo, el burro menos burro, el burro más odioso con que nos hemos tropezado.
¡MERDE!
Sinceramente,
Luis Buñuel
Salvador Dalí

Y todo esto en los años veinte del siglo pasado…

jueves, 4 de octubre de 2007

¿¿QUÉ DIRÍA JEAN PIERRE JEUNET??


Resulta que en la clase de guión escogimos un personaje - fuera de película, serie u obra literaria-, para crearle una historia alterna con los siguientes elementos: una carretera oscura, una luz cegadora, una silueta extraña... Al final esto fue lo que salió despúes de elegir al personaje por el cual Audrey Toutou será recordada toda su vida: Amélie Poulin (Le fabuleux destin d' Amélie Poulin. Francia, 2001).


Amélie ha pasado toda lo noche llorando, pensando que jamás tendrá el valor de acercarse a Nino, y que sus intentos de por lo menos mejorar la vida de los demás son inútiles. Mientras las lágrimas caen sobre su almohada en la oscuridad de su habitación, ve como una intensa luz blanca aparece, y desaparece de inmediato, detrás de la puerta. Extrañada, Amélie se seca las lágrimas y se incorpora, va a prender la luz de la lámpara que está sobre el buró pero, una vez más, la luz blanca se cuela por las ranuras de la madera.

Un poco temerosa, pero también llena de curiosidad, Amélie baja de la cama y, poco a poco, con pasos lentos e inseguros se acerca a la puerta, se detiene frente a ella y lleva con cuidado la mano a la perilla. Toma aire y cierra los ojos, entonces toma con fuerza la perilla, y con decisión la gira y abre rápidamente la puerta. Al abrir los ojos se da cuenta que se encuentra en una carretera oscura y solitaria. Voltea hacia todos lados, sin ver nada más que un camino interminable delante de ella. Da la vuelta, pero se encuentra que sólo hay una pasmosa oscuridad, no hay manera de regresar, sólo es posible caminar hacia delante.

Aunque al principio comienza a caminar cuidadosamente, aprieta el paso, de tal suerte que casi va corriendo mientras llora desesperada. Una luz intensa y cegadora la obliga a detenerse. Para protegerse los ojos se lleva la mano al rostro y trata de ver que produce la luz. A lo lejos, en la blancura, se ve una burda silueta que avanza hacia ella. Conforme se acerca, la silueta toma una forma más y más extraña.

Amélie intenta gritar, pero la voz no le sale; intenta correr, pero está inmóvil, su cuerpo no la obedece. La luz va disminuyendo de intensidad y poco a poco comienza a ver con claridad…parece que reconoce la silueta, sólo que el sujeto en cuestión ha crecido bastante…

Sí, es Cachalote, el pez que tenía cuando era niña y que su madre - antes de morir- arrojó al canal de Saint Martin, sólo que tiene un tamaño similar al de ella y está caminando. Ella sonríe y trata de acercarse. Con un movimiento de aletas, Cachalote le indica que se detenga y se hace a un lado. Amélie abre mucho los ojos y llora de nuevo, pero esta vez de alegría.

- ¿Se reconciliaron?- pregunta con la voz entrecortada.
- Sí – contesta su madre.

viernes, 28 de septiembre de 2007

JE VAIS (rayos! ¿cómo se dice “reprobar”?) MON EXAMEN DE FRANCAIS!!

Son las 8:17 de la noche, y mañana tengo mi examen de final de bimestre de francés. Es inútil, no me concentro. Me prometí no abrir el Messenger, pues en cuanto la ventana se abre, me enfrasco en interminables pláticas, que parecen de café, (¿qué pasa con esta sociedad?, si ya vamos a perder el tiempo, al menos deberíamos perderlo de forma más cálida que enfrente de una pantalla) que al final no llegan a ninguna conclusión satisfactoria, es más ni buscaban llegar a ella, sólo nos gusta estar acompañados. De cualquier forma, los viernes la gente no se conecta, tiene cosas más interesantes que hacer.

En fin, con toda el deseo de buscar grabados de José Guadalupe Posada (de quien por cierto soy bien fan) para enviárselos a una de mis “jefas” de Trovalada, llegué al blog de Pedro y de ahí al de Eli, y luego al mío, entonces me dije: “Bueno, si ya estoy aquí voy a subir un post…no he tenido tiempo…mmm la escuela me absorbe demasiado, bueno como siempre…”, y pensé en subir algo ya escrito, pero lo que salió fue comenzar a escribir esto, sea lo que sea.

A pesar de todas mis buenas intenciones, no puedo evitar subir mis “traumas” al blog; al final para eso es, pues como ya me explayé en “Divagar”, los seres humanos no somos capaces más que de referenciar lo que está en nuestro interior, así escribamos un artículo sobre las características específicas del mapa genómico de los habitantes de Uzbekistán.

Tengo mucho que hacer: estudiar para el examen de mañana, arreglar mi proyecto para el profe Carrasco (¡urge!, ¡urge!), preparar mi exposición del Buñuel surrealista, las veinte mil tareas de la “locura tropical” del profe Del Valle, leer la reforma electoral, algún día abrir el libro de producción de tv, calificar trabajos de la clase de Lenguaje, escuchar el podcast de Nes, y el disco de música brasileña que me pasó Rodrigo, editar la cápsula de Leonel Soto, y arreglar el desastre de cuarto que tengo. Sí, me quejo demasiado, de hecho, me gusta quejarme, es mi forma de liberar el estrés: “¡¡Tengo mucho que hacer!!”.

Sin embargo, la realidad es que por ahora me encanta lo que hago: me encanta estudiar producción, adoro mis clases e ir los martes al IMER, me gusta pasar mis sábados en el francés, corregir los trabajos de los alumnos de Diana, pasar horas aparentemente pérdidas en youtube o en google buscando música o películas…aunque me queje. Ni modo, todavía falta mucho semestre y hasta yo tengo que soportar mis histerias sobre la vida de vez en cuando.

Vaya, este fue el post que debió llamarse “divagar”, mmm alguien dígame si tiene pies y cabeza…Para poner punto final a este viaje, que mejor que los elefantes azules, luces neón y conejos rosas de “Do you realize??” de los Flaming Lips…

miércoles, 19 de septiembre de 2007

MEMORIAS DEL ÚLTIMO AÑO

A diferencia mía, durante la preparatoria conocí a alguien con toda la creatividad y talento para escribir una serie de cuentos raros y divertidos en su clase de Creación Literaria (impartida por el profe Juan Manuel Becerril a.k.a. Spider). El siguiente texto, del cual tengo los derechos exclusivos, lo presentó en el último año en un evento donde los participantes de dicho taller leyeron sus trabajos; por cierto, también fungió como maestro de ceremonias.

Feliz cumpleaños, Jorge. Ojalá que estés escribiendo de nuevo, esto es sólo para que recuerdes…

Adiós…
Por Jorge Antonio Contreras Domínguez

Fue mi más grande amor, mi mayor orgullo. Un día ya no estaba…me dejó, sin darme ninguna explicación, ni haberse detenido para decirme: ¿qué estuvo mal?

Al levantarme por las mañanas, veía salir el Sol con un entusiasmo sólo comparable con la explosión del big- bang, la cual estremecía todo en mi interior; era maravilloso contar con tal pasión, sentirla en la mañana, en la tarde y toda la noche.

¿Qué haré ahora? Ciertamente, lo ignoro. Me asusta en demasía la simple idea de tener que enfrentarme al espejo y ver del otro lado un ente extraño, tal vez opaco, vacío, como si el Sol dejara de arder o su resplandor se hubiera extinguido.

A cada minuto me pregunto, ¿…y, si estuviera aquí?:

Supongo que sería más fácil caminar por la calle, hablarle a la gente, dejar fluir el cauce de mis ideas, en vez de lastimar la visión de más de un peatón.
1.1 Aunque, por otro lado, creo que no soportan la luz que irradia de mi personalidad, comenzando por el Polo Norte de mi ser, génesis de mis pensamientos y coordinador de mis movimientos.

Rayando por el camino de la especulación, imagino como sería mi vida cotidiana. Dejaría de representar un punto de referencia para las masas…

2.1 …y en una de esas, se desvanecería mi parecido con aquel infame, que con gesto ridículo y la voz plagosa, aparece todos los domingos vociferando cantos bélicos que emergen de la pasión de “todos los aficionados que viven la intensidad del fútbol”.

La delgada línea que divide la realidad del mundo de lo imposible, me limita para seguir entregándole todas mis caricias, emociones, sentimientos, a aquel amor que estuvo aquí…allá…en medio…en mi imagen.

Pienso en todas partes, y hoy, en ninguna.

3.1 Lo mejor para salvar mi alma quebrantada es creer que algún día, no muy lejano, por la cantidad de males que me aquejan y carcomen mi existencia días con día, nos encontraremos de nuevo y nos fundiremos en uno solo, indivisible y eterno.

Por lo pronto, nada de esto ha sucedido; yo, sigo en la pena y el dolor que causa la incertidumbre, grabando mi propio epitafio el cual deberías decir: “Aquí yace quien amó con todas sus fuerzas, lo que todo hombre debe amar”.

Perfecta descripción para lo que una vez atesoré e inexplicable y súbitamente perdí.

Al final sólo te puedo decir adiós…querido cabello…

domingo, 2 de septiembre de 2007

DIVAGAR

La vida se acumula, esperando ser resuelta…y yo, sin poder concentrarme en ella.

“Destino”, lo llaman quienes esperan que el camino de sus vidas haya sido celestialmente otorgado mucho antes de tener que hacer una elección. Otros prefieren la “casualidad”, el “azar”; para mí, son sólo “cosas que pasan”, misteriosa serie de sucesos que fueron encadenándose hasta que el preciso lugar embistió de frente con el preciso momento.

Esta es la forma en que inicia toda comunión de mundos: ¿qué otra cosa podemos referenciar cuando hablamos sino a nosotros mismos?, ¿qué otra cosa sino el universo propio? Cuando en este intercambio de entes abstractos la banalidad muere y se toca el alma, no existe emoción más grande que la de encontrar en alguien un mundo capaz de amalgamarse con el tuyo, de dejar profundas huellas.

Ahora me pregunto: ¿pensaste alguna vez lo mismo?, ¿habrá quedado algo –pequeño, hasta vacío- de mí en ti?

Maldita la hora en que siempre antepongo la idea a la persona, el corazón se confunde (¿de verdad el corazón?) y las ilusiones crecen sin sentido, más como malahierba que como flores.

Y al final yo seguiré ahí, nada va a cambiar. Esperaré, cada vez menos impaciente, el momento de encontrarnos, pero la euforia de poner seres divinos entre nosotros perdurará.

Y…y…creo que ya divague mucho…

jueves, 9 de agosto de 2007

TRAVESÍA POR TIERRAS DE MAR, MÚSICA Y CAFÉ

Estas son imágenes captadas por el pequeñísimo y rapidísimo recorrido que hice por Veracruz con mi familia; qué lugar, pero sobre todo ¡qué calor!

La primera parada: Córdoba


Veracruz: el puerto que vive cuando el sol se pone.

A eso de las 5 de la tarde, la gente comienza a llenar las calles del puerto. En el zócalo, la música fluye por todas partes: ya sea al ritmo de las marimbas, grupos jarochos y hasta mariachis en los portales donde se encuentran los restaurantes, de la banda que se planta en el zócalo para tocar danzón mientras los expertos hacen gala de sus mejores pasos, o en fin, cualquier rincón es bueno para todos los ritmos y bailes.


La tranquilidad a la orilla del Papaloapan: Tlacotalpan, el pueblo de colores.



Nombrado Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO, Tlacotalpan es un pequeño poblado situado a la orilla del río Papaloapan, por el cual es posible hacer una travesía en lancha.
A medio día el calor es tan insoportable que el poblado permanece vacío en espera de latarde. En los portales que rodean la plaza principal hay muchos pequeños establecimientos que ayudan al visitante a soportar los estragos del sol, en los cuales se vende desde un refresco, un delicioso helado de jovo (fruta típica del lugar) hasta los toritos (bebida de ron y crema de frutas) con mucho hielo.


Una vista de la Iglesia de La Candelaria, la fiesta principal del pueblo es precisamente el 2 de febrero.

La Antigua: entre ruinas y quiromancia.
Uno de los primeros asentamientos españoles en América fue La Antigua, donde yacen las ruinas de un edificio del siglo XV al que popularmente se conoce como “Casa de Cortes” aunque probablemente el conquistador nunca habitó el lugar. Al entrar en ellas mujeres de faldas y cabellos largos, que con un acento misterioso insisten en leerte la mano, “te cobro barato”, dicen.

lunes, 30 de julio de 2007

UNA MIRADA A LA PARANOIA: A SCANNER DARKLY

Más que un simple género literario o fílmico, la ciencia ficción se ha convertido en un medio muy efectivo para la crítica social y política, pues tiene la posibilidad de mostrarnos el futuro posible de acuerdo a las circunstancias del presente. Así pues, grandes personajes han tomado parte en el intento de construir escenarios posibles, generalmente distópicos, para situar al ser humano de acuerdo a los acontecimientos que les tocó experimentar en carne propia: Mary Shalley y los cambios dramáticos en la era de la revolución industrial; H.G. Welles y las tensiones entre potencias de los primeros años del siglo XX, además del desarrollo de la ciencia de la misma época; Aldous Huxley y las dos guerras mundiales, Orson Wells y el incipiente poder de los medios sobre las masas, George Orwell y la Guerra Fría, Stanley Kubrick y la carrera espacial, etc.

Para el escritor norteamericano Philip K. Dick, el punto de partida de su obra A Scanner Darkly fueron las investigaciones por parte del FBI de las que fue objeto y los ataques paranoicos que sufría, producto, entre otras cosas de la criminalización de los consumidores de drogas durante el gobierno de Richard Nixon, incluyendo a algunos intelectuales. En palabras del propio Dick en una entrevista que otorgó en Francia en 1977: “Cualquiera como yo que creció y formó parte de la contracultura de Berkeley (California), se convertía en un hombre marcado durante la administración de Nixon”.

La novela cuenta la historia de Fred, un agente de narcóticos, que obedeciendo las órdenes de sus superiores y bajo la identidad falsa de Bob Arctor se convierte en un consumidor y traficante de la Sustancia D, la principal droga ilegal contra la que lucha el gobierno. Debido a su adicción, después de un tiempo Fred y Arctor se convierten en identidades separadas, y mientras el equilibrio mental de Bob va perdiéndose, Fred lo vigila de cerca para entregar cuanta información de sí mismo encuentra a “Hank”, su superior, otro agente encubierto.

Favoritas entre las obras literarias para ser adaptadas a la pantalla grande, - basta recordar el caso de la novela Do androids dream about electric sheeps? convertida en el clásico de Ridley Scott, Blade Runner (1982)- la pluma de Dick en A Scanner Darkly fue trasformada a guión por el director Richard Linklater para crear la cinta del mismo nombre estrenada en 2006, que a México llegó bajo el título de “Una Mirada a la Oscuridad” directo a DVD, protagonizada por Keanu Reeves, Robert Downey Jr. y Winona Ryder.

Linklater tiene en su filmografía temáticas tan diversas como el fallido western The Newton Boys (1998), el romance inteligente de Before Sunrise (1995) y su continuación Before Sunset del 2004, la cual le valió una nominación al Oscar por mejor guión adaptado; así mismo dirigió la comedia School of Rock (2003) protagonizada por Jack Black y la controvertida Fast Food Nation (2006).

Ahora, en esta su incursión en forma dentro de la ciencia ficción, sale bien librado -a pesar de lo lenta o confusa que pueda parecer la obra en un principio- gracias a la técnica y la estética que utiliza, la cuidadosa selección del reparto y el aire de actualidad que le imprime a la historia: “Aunque estamos oficialmente en el terreno de la ciencia ficción, yo no lo sentí así. Se siente muy contemporáneo, muy verdadero”, explica el cineasta texano. La acción se sitúa a siete años del presente, según reza el texto al inicio de la película, transición temporal que es palpable sobre todo en el despliegue de alta tecnología que la policía tiene a su cargo para monitorear en todo momento los movimientos de los traficantes de drogas. Entre estos adelantos científicos esta un traje que permite a los agentes guardar su verdadera identidad a través de la proyección constante de imágenes de otras personas sobre él.

De haber sido una producción convencional, probablemente el dichoso traje hubiera sido un dolor de cabeza para el director, sin embargo, esta cinta está filmada en una técnica de animación llamada rotoscope. Para llevarla a cabo, la película se filma primero a la manera tradicional, y después por medio de un software especial se crea el efecto de semi- realidad en la imagen, y además se agregan detalles o se eliminan otros en la edición, como el traje. Cabe mencionar que este estilo da un énfasis muy interesante a la expresión facial de los personajes cuando se les hacen close ups, en este caso especialmente al personaje de Revees.

Durante todo el filme está presente la incertidumbre en la cual vive el agente Fred y su alter ego Arctor, y quien mejor para interpretar a un hombre confundido que Keanu Reeves, quien mantiene una expresión natural de desconcierto, de inseguridad pero al mismo tiempo demuestra la conciencia de quien asume su rol. Para Fred/Arctor nadie está exento de sospechas y la lealtad no existe. Por un lado, el agente Fred tiene a “Hank”, alguien que como él usa uno de esos trajes que ocultan su verdadero rostro, ordenándole qué hacer, pidiéndole información. Por otra parte, Bob Arctor vive en una casa maltrecha con otros dos adictos, en los que no confía: James Barris, interpretado por el siempre agradablemente sobreactuado Robert Downey Jr, y Ernie Luckman (Woody Harrelson). Un tercero, Freck ( Rory Cochrane) los visita frecuentemente; es un personaje que se siente externo pero a través de él podemos ver que tan lejos llegan los efectos paranoicos de la Sustancia D. Son estos personajes secundarios los que dan cierto tono de humor ácido a la cinta, uno de sus principales atractivos.

Otro personaje constante en la vida del protagonista es Donna Howthorne, una adicta a la cocaína que surte a Arctor de Sustancia D. Esperando que le presente en algún momento a quien le da la droga a ella, Bob compra cantidades cada vez más grandes del narcótico; al mismo tiempo parece desarrollarse una relación sentimental, aunque asexual, entre ellos.

En sus encuentros y desencuentros con la realidad debido a la ya grave lesión cerebral causada por la Sustancia D, Fred/Arctor tiene el recuerdo latente de un pasado que comienza a escapársele, en su memoria aparecen una mujer y dos niñas- su esposa e hijas- pero, ¿por qué él no está con ellas?, ¿a quién espía realmente?, ¿quién es Donna?, ¿qué es lo que el omnipresente scanner puede ver? ¿Quién es Bruce?

Este es el trailer...ojalá le echen un ojo a la película


viernes, 13 de julio de 2007

MARAÑA DE CONTRADICCIONES

No creo que la gente piense que soy una contradicción andante…tal vez sí lo crean las personas que me conocen muy bien, pues ya alguna vez he escuchado cosas como “no pareciera que te guste el rock”, y mi favorita personal: “eres una fresa que se niega a serlo” – gracias Eli-. Pero ese no es el punto. “No en vano me llaman ´pequeña maraña de contradicciones´”, leí hace muchísimo en el Diario de Ana Frank y la frase se me quedó muy grabada.

La contradicción que yo encuentro resulta de preguntarme: ¿por qué deje de escribir? Cuando iba a la primaria me gustaba escribir cuentos, fábulas moralistas con la única finalidad de que mis maestras dijeran: “¡Qué bonito escribes!, ¡sigue así!”, y de donde salieron títulos como “La niña y sus juguetes” – sobre una pobre huérfana que intenta cambiar sus muñecos de trapo por las medicinas que salvarán la vida de su abuelita- , e incluso una saga completa titulada “El país de los animalitos” – híbrido extraño entre las películas de Disney y El viento en los sauces, claras evidencias del esmerado ejemplo que me daban en mi casa- . Iba gritando a los cuatro vientos que quería ser escritora, al mismo tiempo historiadora o arqueóloga. Pensándolo bien, en esa época también escribía para que Danielito pensara que yo era una niña muy inteligente, era el niño más aplicado y con quien siempre estaba en franca competencia literaria, aunque nunca lo pude opacar, dicho sea de paso.

La secundaria fue divertida pero superficial. Cambie la pluma, el papel y los libros de historia por la revista Tú, la música pop, MTV y las series de Sony Entertaiment Television. Aún así, todavía gané un concurso de la SEP, con otra de esas historias infantiles que eran mi especialidad: “La historia de Pico, el gorrión”, un cuento en el mismo sentido que los otros, pero al cual, dí un final de tragedia griega – que hizo llorar a mi mamá - para que fuera más “maduro”.

Hasta ese momento iba por buen camino, digo mi escritura era mediocre, pero andaba por la vida mostrándole mis cuadernos a media humanidad. Después me perdí…durante la preparatoria mis inseguridades no me dejaron otro espacio más que el de mi diario. Un miedo absurdo, ahora lo sé, a la exposición pública, al ridículo y a la crítica me dejaban pasmada, y a más de uno se le hizo extraño que fuera a estudiar Comunicación, porque claro, más que contradictoriamente, mi pretensión más grande en ese entonces era conducir en radio o escribir en una revista, justo cuando lo que más terror me causaba en la vida era ser leída o escuchada. En fin, después se me cruzó el cine, pero esa es historia aparte.

Ya en la Universidad sería reprochable seguir negándome a que alguien dé su opinión sobre lo que hago. Escribir un blog era ya atractivo desde hace un tiempo pero últimamente – un poco antes de que el ocio vacacional me atrapara por completo- me hice asidua visitante de los espacios de algunos amigos (los links están en la columna de la derecha) y terminé por convencerme. Vaya ventajas que nos da la tecnología, si esto hubiera existido en los 50´s seguro que Godard (God- Art?) y Truffaut así hubieran empezado a ser los críticos que terminaron por convertirse en cineastas.

Pues bien, después de esta catarsis en todo el sentido aristotélico de la palabra, espero ya no volver a mostrarles mis traumas aquí, sino más bien un poco de lo que veo, leo, escucho, visito y por supuesto, escribo. Algunos textos ya caducaron, pero igual los voy a publicar. Esperemos que la Red atrape a algún lector despistado, a mis amigos y una que otra araña de Marte.